JOAQUÍN SABINA SE DESPIDIÓ DE LOS ESCENARIOS

Contra todo pronóstico fue el nombre de la última gira de Joaquín Sabina con la que visitó Argentina y brindó seis funciones en el Movistar Arena. Contra todo pronóstico se tituló porque, tal como él confiesa y cuenta durante el show, tras sus problemas de salud, sumado a los achaques de la edad, Joaquín ya tiene 74 pirulos, tanto él como nosotros, sus fanáticos, imaginamos que su retorno a los escenarios en una gira mundial no serían una posibilidad.

Ese “Contra todo pronóstico” habla de cómo todos intentamos vaticinar o intentar hacerle burla al destino creyendo que podemos manejarlo. Por suerte las nanas quedaron de lado y, contradiciendo a su canción que habla de Comala, Sabina pudo volver al lugar en donde fue muy feliz, pudo volver a Buenos Aires, a su querida Argentina.

Él quiere a estas tierras y nosotros, los habitantes de este país, le rendimos homenaje y le demostramos el infinito cariño que nos ha ido dejando con sus canciones. 

Quizás “Aquellas banderas de la patria de la primavera” ahora, con tu gira, probablemente la última por Argentina, flameen sin ganas o simplemente dejen caer su tela sobre el mástil y quede todo en el olvido.

“Nunca es triste, Sabina, la verdad” pero a veces la verdad duele como es entender que los años pasaron y con ellos los achaques y dolores fueron dejando secuelas en los héroes de la música: primero fue Serrat en noviembre, ahora sos vos, Joaquín. Los dos pájaros no contraatacan más y los recuerdos quedaran en eso, en simples expresiones y muecas de nostalgia y tristeza por lo que ya no volverá a ser.

Seguirá por siempre tu música en los recuerdos y en los dispositivos, pero no habrá complicidad en la butaca y el escenario, yo aquí y tú allá viviendo un momento eterno que puede reflejarse a través de tu música y mi sentir.

Y sin embargo, 19 días y 500 noches después "sintigo” y en un triste momento tras el reciente adiós a Serrat, Llueve sobre mojado y los ojos se vuelven a humedecer por tu hasta luego que deja una leve ilusión de otro “contra todo pronóstico” te haga presente en el escenario y que el bombín ubicado sobre el taburete vuelva a hacer una sombra sobre el telón rojo de tu querido Gran Rex.

Nos sobran los motivos para volver a querer verte y sintiéndolo mucho intentaré entender que quizás nunca más, al menos en este plano, vuelva a escuchar la canción más hermosa del mundo en vivo. 

Sabina se despidió de Buenos Aires y, con su show en Rosario el próximo miércoles, es probable que sea su despedida de los escenarios de Argentina, su segunda casa, tal como él siempre ha dicho.