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LOS DUROS PRONÓSTICOS DEL FMI SOBRÉ LA ECONOMÍA DEL PAÍS

El Fondo Monetario internacional prevé un deterioro de las principales variables económicas este año. En el marco de sus estimaciones para los países occidentales, recién avizora un cambio de perspectivas en 2024.

Nacionales Alba Alba

Argentina tendrá un crecimiento de apenas 0,2% luego de haber registrado una expansión del 5,2% en 2022. De esta manera se posiciona como el país con menor crecimiento de los que evalúa el Fondo Monetario Internacional (FMI). Sólo Chile tendrá un peor desempeño, con una caída de -1,0%.

 El organismo financiero multilateral difundió hoy sus estimaciones 2023 y 2024 en las economías occidentales, destacando que los precios minoristas treparán este año a 98,6% en el país, mientras que el desempleo tendrá una suba del 7% en 2022 hasta 7,6% este año.

 El informe fue difundido en la previa de la Asamblea conjunta de Primavera del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial en Washington.

El dato de crecimiento de la actividad económica genera cierta controversia, por cuanto en el año terminará registrando una fuerte caída de cinco puntos porcentuales, lo que supone una probable aceleración del desempleo y la pobreza. 

Crecimiento en la encrucijada

Desde el Fondo estiman un avance de la actividad del 0,2%, que es mínima pero técnicamente evita caer en recesión. Este dato, sin embargo, está lejos de las estimaciones de la mayoría de las consultoras privadas, que prevén caídas de hasta 2% del Producto Interno Bruto. 

En ese sentido es que el Fondo ve una aceleración del índice de desempleo de casi 10% o 0,6 puntos porcentuales. 

 En cuanto a la inflación, la estimación del FMI también es relativamente optimista para el año, manteniendo las dos cifras, una estimación que está lejos de las proyecciones de los analistas privados, que ya proyectan una suba del índice de precios al consumir por encima del 100%.

El estudio toma datos de todos los países del continente americano, donde sobre sobresale un crecimiento más bien débil, con expansión de entre 0,4% y 1,8% en América del Norte, y del 1% en Sudamérica, hundido por el crecimiento casi nulo de Argentina y la caída del -1,2% prevista de Chile, que es compensado parcialmente por el salto del 5% de Venezuela y el 4,5% de Paraguay.

Sólo las economías de América Central - crecimiento del 3,8%- y del Caribe, con un despegue del 9,9% en el año tuvieron un desempleo notorio.

Para 2024, larguísimo plazo para un país como Argentina, que además atravesará un complejo proceso electoral, con probable cambio del signo político al mando de la Rosada, el FMI prevé crecimiento del 2%, con inflación retrocediendo a niveles del 60%, balance de pagos en 0,8% - este año en 1%- y desempleo estacionado en 7,4%.

 

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